.:: Reto: 7 días sin plásticos ::.

Estamos (por desgracia) hartos y hartas de ver imágenes de playas infestadas de plásticos, campos repletos de desechables plásticos, calles manchadas de basura plástica… ¿pero además de hartamos, qué hacemos al respecto?

La situación del planeta es crítica. Y ya no es una frase hecha. La ONU nos ha dado 20 años para ponerle una solución antes de que sea tarde.

¿Te imaginas un mundo “que ya está destruido” para tus hijos? ¿Te imaginas que tus nietos no pueden conocerlo?

No es una utopía. Es una realidad y está en tu mano cambiarlo.

Por eso, súmate desde hoy al reto viral: 7 días sin plástico.

Este reto no se trata de un “challenge” más para cumplirlo y ya está. Se trata de una forma de acostumbrarnos a que es posible u necesario vivir en un mundo sin plástico.

Y si lo usas, que sea para conservarlo a larguísimo plazo, de una forma casi permanente.

¡Vamos a por ello!

Día 1:
Mentalízate. Busca alternativas, y focaliza tu objetivo:
NO existe el plástico en esta semana.
Como es lunes, si tienes que ir a hacer la compra semanal, mucho cuidado:
Bolsas de algodón o cajas de cartón para cargar tus compras.
Mallas reutilizables para la fruta y verdura. Carrefour y Lidl las tienen disponibles). Si no las tienen, llévalas de casa.
Si compras carnes o pescados, de la sección de frescos, que vayan envueltas SÓLO en el cartón protector. La bolsa plástica la ahorras y lo envuelves en una malla.
Leche, agua, regresos… cómpralos, pero en vidrio, que se recicla miles de veces.
Cereales, panes, galletas…en envoltorios de cajón.
Legumbres y frutos secos: a granel, y en una malla reutilizable o bolsa de algodón.
Recuerda: no existe el plástico en tu compra. ¡Tú puedes!

Día 2:
Pasado el día más complicado, con tus productos en envases respetuosos para el medio ambiente, llega el momento de trasladar o guarder ciertos alimentos u objetos en general.
Reutilizar e inventar es la clave: reutilizable envases metálicos (como antiguas cajas de galletas metálicas que tengas por casa), o cajas de cartón semi-vacías para guardar esas cositas. Nada de cajas de plástico de almacenaje.
Muchos alimentos no necesitan estar guardados en plásticos, como frutas y verduras: ellos, directamente, al cajón de la nevera.
Los restos de alimentos depositados en un plato firmemente cubierto con una tapadera de silica (nada de papel film o aluminio), o directamente un paño de cocina o tapadera de batería de cocina.
Galletas, legumbres, cereales… pueden dejarlos en el mismo envase de cartón, o reutilizar tarros de vidrio o metal que tengas por casa.
¡Reutilizar y reciclar es la clave!

Día 3:
Después de tener claro que el plástico es completamente sustituible, tenemos que comprender que no todo el plástico es malo, si no que, si tenemos empaques de plásticos, le demos el uso correctamente.
En la higiene y la cosmética es importante medir el uso de plásticos y, aunque tengamos productos plásticos, se trata de que, tras su fin y su uso, lo sustituyamos por empaques más ecológicos, o por productos reutilizabas.
Los desodorantes en empaques plásticos son muy poco saludables. Tras su fin, busca opción de desodorante sólido natural, desodorante en frasco de cristal, o desodorante en empaque de cartón.
Si eres mujer, sabrás que los tampones y las compresas son muy poco beneficiosos para tu salud (ponen en contacto microplásticos, tóxicos y alégrenos directamente con tu cuerpo), y muy contaminantes (la mayoría de la basura del mar son compresas, pañales y tampones). Tras el fin de tu empaque habitual, utiliza copas de silicona reutilizables, o compresas reutilizables y lavables. ¡Super saludables y cómodas!
En cosmética, igual. Prescinde de los envoltorios plásticos en pintuuñas, pintalabios, discos desmaquillantes, geles… busca envases de vidrio, compra recargas y carga tu mismo.

Día 4:
¡En la calle no hay que bajar la guardia!
Nada de pajitas. Educadamente, di «no, gracias», y listo. No pienses que por una más no pasa nada, porque eso dicen millones de personas al día. No la necesitas y el mar, tampoco.
-Niégate a comer o beber en vajillas de plástico. Es perjudicial para tu salud (el «sabor a plástico» en las bebidas son microplásticos para tu organismo), y es absurdo cuando la porcelana se puede reutilizar miles de veces.
Lleva siempre tus bolsas de tela allá donde vallas. Ya sea para comprar, salir de paseo, ocio… ¡una mochila o bolsa decorada sustituye a varias de plástico!

Día 5:
¿Sabías que tu ropa lleva plástico?
Camisetas, sueter, legging… en general, todo lo que no sea 100% algodón en esta semana está prohibido.
Además de ser el material de ropa que menos daño, dermatitis y alergia produce, es la más respetuosa con el medio ambiente. Recuerda que no existe la necesidad de utilizar ropa con elementos plásticos. Elige 100% algodón y, si es orgánico, mucho mejor.
Cuidado, también, con los complementos que utilices. Elige joyería de plata u oro, o tela sencilla, en lugar de plástica. ¡Esta semana no se puede, y así, aprendes a prescindir de ella!

Día 6:
En este penúltimo día ya tenemos superado la gran mayoría de uso de plásticos, y seguro que has visto a tu alrededor cómo los demás usan plásticos con total desconocimiento de la problemática actual y habrás pensado muchas veces: «eso es prescindible».
¿Por qué, en lugar de pensarlo, no lo expones abiertamente?
Utiliza tus redes sociales, o tu propia palabra, para eso. En tu círculo de confianza comenta con naturalidad cómo llevas tu casi acabado reto, y lo fácil que ha resultado.
También propónte crear conciencia en tu ciudad, organizando pequeñas charlas de vecinos, amigos, familiares…
Recuerda: objetivo libre de plásticos.

Día 7: 
¡Ultimo día de nuestro reto de 7 días libre de plásticos!
¿Pero por qué no extender esto en todo nuestro entorno?
Habiendo comenzado el lunes, hoy debe ser domingo. Y es un excelente día para pasear tranquilamente y, en una o varias bolsas de tela, junto a unos guantes de tela dura y rígida, ir recogiendo residuos plásticos de las calles, campos, bosques o descampados que rodeen a tu ciudad.
No se trata de que hagas un trabajo que no te guste… si no que realices un trabajo necesario, que es guardar plásticos para depositarlos en su correspondiente contenedor (amarillo, en cualquier caso).

¿Fácil, no?
Súmate.

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